Capitulo: 24, 25, 26 y 27

Capitulo 24: El carro de la Muerte

En este capitulo Olga se empeña a dar con el rastro de su marido. A cabo de 6 meses, se entero de que su marido estaba trabajando en el campo de Buna, era cirujano del hospital. Olga pasó una nota a su marido en la que le indicaba donde verse, así que se hizo pasar por loca. Cuando el carro llego a su destino, pasaron por la sección de operaciones y fue ahí donde lo vio cara a cara. Mientras os oficiales de la SS comían, Olga se vio con su marido en la sala de quirofano; Ninguno supo decir nada, ya que solo tenían pensamientos de tristeza. Su marido le pidió que por favor no volviese a arriesgar su vida, ademas de que aquellas excursiones serian canceladas, y así paso. Cuando Olga regreso al carro, y vio a su marido parado en la entrada del hospital, aquella fue la ultima vez que lo vería, ya que después se entera por un prisionero francés, que su marido al tratar de ayudar a una persona, un oficial de la SS le disparo a los dos, matándolos.

Capitulo 25: En el Umbral a lo desconocido

La mañana del 17 de enero de 1945, las tropas de la SS reunieron todas las fichas de los enfermos y les prendieron fuego. Al día siguiente la lagerälteste, les anuncio que evacuarían el campo. Lo primordial para olga eran las parientes enfermas, las cuales algunas muchas no podían mantenerse de pie, pero Olga junto con sus compañeras ayudaban a otras tantas a tomar sus pertenencias y vestirse. Antes de partir, Olga pensó que si caminarían durante varios días, morirían de hambre así que ella y otras compañeras de su barraca fueron al almacén a saquear todo el pan que pudieron.
Cuando llegaron a la entrada del campo, treinta guardias estaban formados y revisaban a una por una, ya que las mujeres viejas y débiles eran regresadas al campo. Ya fuera del campo, se les pidió que se formaran y ya que esperaban un convoy de seis mil mujeres.
después de caminar por unas cuantas horas llegaron a un tramo de carretera, desde ahí Olga miró el campo y recordó el momento en que llego aquel lugar junto con su familia. Esto le llevo a la conclusión de quererse fugar.

Capitulo 26: La libertad

Al ir caminando por la carretera de Auschwitz, se escuchaban poderosas armas de fuego las cuales se iban acercando cada vez mas.  Los guardias de la SS estaban armados con ametralladoras y granadas de mano. Tenían ordenes de liquidar a las seis mil mujeres presas, en caso de ser sorprendidos por un avance ruso, para que los rusos no pudieran liberar a ninguna.
Después de pasar por una ciudad polaca, el grupo se detuvo en una cuadra, donde después de ver a varias mujeres seguir caminado en medio de la oscuridad, Olga, Magda y Lujza, se fugaron. Caminaban rápidamente o gateaban para no se vistas.
divisaron el campanario de una iglesia. Al llegar a la aldea polaca, fueron directamente a la iglesia.Un Hombre estaba parado en aquella puerta, y les indico su casa. Pero una patrulla alemana se acerco al patio de la iglesia, así que corrieron a la casa, pero estaba cerrada así que entraron por una pequeña brecha que daba hacia un granero, con paja casi hasta el techo. Los patrulleros se acercaron al granero pero desistieron en la búsqueda prometiendo volver por la tarde.
A primera hora el dueño fue a despertarlas y las llevo a otro refugio, pero se encontraron con una patrulla alemana. Gracias a los cohetes rusos, Olga y sus amigas pudieron escapar de nuevo hacia una alcoba donde se encontraba una pareja y su hija, los cuales dejaron que se quedaran ahí. Olga por la mañana decidió bajar a la cocina a hacer galletas de Transilvania. pero sin darse cuenta entro un soldado alemán, el cual pregunto su procedencia.
Así que se quedo con ella y la familia que ahí habitaban, pero una mañana los soldados tuvieron que irse, y con ellos a olga. Durante tres días estuvo atada por las manos a un carro de tiro y la obligaron a seguir caminando. Una noche después de roer sus cuerdas por fin logro liberarse. se oculto entre las casa y evitaba a los soldados, hasta que vio a una mujer, que la llevo a un río y le mostró una casa iluminada, pero debía cruzar el río. Cuando
llego a la casa, se entero de que aquel lugar era el centro de bombardeo, así que decidió esconderse muy bien en la casa.al terminar aquel bombardeo, donde los nazi habían tenido que retirarse, la gente del pueblo afirmaba que los rusos tardaría tres días en llegar, pero aquella misma noche tomaron el pueblo. Pero a pesar de ser un idioma nuevo, Olga pensó que no le habían dado mejor regalo que su libertad.

Capitulo 27: Todavía tengo Fe

Este capitulo, quizá es el mas importante ya que, Gracias a Olga nos damos cuenta de que la humanidad así como puede ser unida, puede ser repulsiva y terrorífica. Afortunadamente hoy en día, este "imperio nazi", no se ha vuelto a repetir.
Yo, Marlene Alvarez , me quedo con la siguiente frase:

"Recuerdo las interminables discusiones de nuestros días estudiantiles cuando nos formulábamos la pregunta de que si el hombre era fundamentalmente bueno o mal, y tratábamos de hallar una respuesta. En Birkenau se sentía una tentada de responder que el hombre era inalterablemente malo. Pero esto seria una confirmación de la filosofía Nazi, la cual pretende que la humanidad es estúpida y perversa, y que necesita ser metida en cintura base de palos."

       Olga Lengyel-Los hornos de Hitler.

 

Capitulo: 21, 22 y 23

Capitulo 21: ¡París ha sido liberado!

En este capitulo Olga nos habla de la emoción y sentimientos que tenia gracias a un hombre que llego a la enfermería con la noticia de que París había sido liberado, pero al ser una gran noticia los alemanes al enterarse, les daban sopa aun peor. Un día un polaco y tres franceses fueron ahorcados por propagar rumores falsos y otros millares de prisioneros sin nombre fueron exterminados en la cámara de Gas. A pesar de ello Olga y sus compañeras imaginaban como seria su rescate, tenían un sin fin de ideas sobre la liberación de prisioneros en aquellos campos.
. . .
En el campo se pidió el nombre información alas internas sobre familiares americanos, esto para ser canjeadas por prisioneros alemanes, algunas como Olga ya imaginaban su navidad fuera del campo, pero una semanas después los "americanos" fueron convocados, se les dio ropa nueva y fueron llevados a la estación del ferrocarril. Semanas después se enteraron de que los americanos fueron llevados a otro campo de la comarca, pero sabían que algo estaba mal, ya que la ropa entregada a los americanos, su regresada a los almacenes del campo; Los americanos habían sido exterminados.

Días después se enteraron del americano de la barraca 28, el doctor Albert Wenger, quien después de la liberación dio una declaración a los ejércitos liberadores sobre como eran tratados en Alemania. En esta declaración Albert Platico sobre todo lo que vivió en el tiempo de estancia en aquellos campos.

Capitulo 22: Experimentos científicos

Olga nos platica que mientras estuvo en los hospitales de los campos FKL y E, vio como los prisioneros eran utilizados para experimentos nazi.

Uno de sus experimentos mas comunes que realizaban, era la inyección de un germen, que para los científicos perdía interés cada que empezaba a hacer reacción en sus pacientes así que de alguna u otra manera todos iban a las cámaras de gas.
Así como la menstruación de las mujeres, ya que a las recién llegadas se les decía que serian fusiladas en dos días  y así comprobar si la noticia causaba alguna alteración en la menstruación.

Al doctor Mengele le encontraba un enorme interés a los Gemelos y enanos. cuando llegaban gemelos al campo, se les daba un trato de favor y hasta se les permitía quedarse con su ropa y cabello. En cuanto llegaban los hermanos, se les fotografiaba de todos los ángulos posibles.
Uno de los experimentos con estos niños era la inoculaban a uno de los gemelos ciertas sustancias químicas  y el doctor esperaba a observar la reacción que le producían, si no se le olvidaba mientras tanto.
Los enanos eran una pasión para el doctor Mengele, ya que este los coleccionaba, pero aun así realizaba experimentos de forma anormal. Cuando hacían transfusiones, utilizaba adrede tipos de sangre contraindicados; naturalmente se producían complicaciones, pero Mengele no tenia que dar cuenta a nadie de sus pruebas.

Capitulo 23: Amor a la sombra del crematorio

En este capitulo Olga nos platica las formas en que tanto los hombres como las mujeres mantenían su vida sexual.
las relaciones entre los(as) prisioneros (as) se suscitaba en los lavabos y en los baños, sin embargo era la manera mas inhumana de una mujer de conseguir una migajas de pan.
Las mujeres jóvenes tenían aventuras. Las blocovas tenían espacios para ellas solas en las barracas, estaban en ventaja con respecto a las demás y no titubeaban para llevar a un hombre a aquel lugar, el riego mas grande que corrían eran ser encontradas por un oficial de la SS ya que que el castigo, ademas de ser una golpista  podía ser la destitución del rango.
De igual Forma, como en cualquier lugar, existían los invertidos (as); al igual que el grupo de lesbianas.
Las jefas del campo eran famosas por sus aberraciones. Irma Grese era bisexual.Un día Olga fue testigo de aquel "encerron" de una joven polaca, un georgiano y la Grese (como le decían) , este espectáculo termino con la joven polaca llena de latigazos en la cara y pecho. Irma satisfacía así sus necesidades.

Capítulos: 17, 18 , 19 y 20

Capitulo 17: Los métodos y su insensatez

Olga nos cuenta que Birkenau a comparación de Auschwitz era un campo de exterminio, pero que en ocasiones había comandos de trabajo destinados a ciertas tareas manuales. Nos dice que después de la lista en la mañana se iba a la cocina para hacerse cargo de los peroles de alimentos, tenían que cargarlos hasta el hospital que se encontraba casi a un kilómetro de distancia. Para Olga era un trabajo útil y que le resultaba fatigoso.
Pero de igual manera había tareas totalmente inútiles como transportar a mano un montón de piedras de un lado a otro, cada interna debía llenar dos cubetas hasta el borde, caminaban con ellas varios metros y las vaciaban, de ahí las teníamos que regresar a su lugar de origen , a veces tenían que cargar ladrillos y hasta barro; para Olga el único objetivo de hacer esto era quebrantar la resistencia física y moral de las seleccionadas.
También nos menciona que una vez se les ordeno limpiar los evacuatorios, solo con dos cubetas, llegaban todas la mañanas al pozo que había detrás del hospital. Sacaban a calderadas el excremento y lo cargaban hasta otro pozo situado a unos cuantos centenares de metros, el trabajo era todo el día  pero al terminar estaban muertas de asco y de repugnancia, se lavaban lo mejor que podían y se iban a la cama. El olor que despedía su compañera de trabajo que dormía junto a ella, la mareaba literalmente y ella producía el mismo efecto.

Capitulo 18: Nuestras vidas privadas

En este capitulo Olga nos platica sobre sus 12 compañeras con las que vivía en una habitación  donde no tenían ventilación, pero la consideraban un paraíso solo por el simple hecho de estar apartado del campo y en ella podían gozar de un grado mínimo de independencia. Las trabajadoras medicas estaban siempre juntas: por la noche en el pequeño cuartucho de la barraca 13 y por el día en la enfermería. En aquel lugar carecían de sillas, los únicos sitios donde se podían sentar eran dos camastros mas bajos, los de la doctora G. y la dentista; Aquellas dos inteligentes mujeres quienes Olga creía que habían sido excelentes amas de casa, sollozaban como niñas cada vez que se sentaban en sus camas y hasta cierto punto tenían razón ya que la enfermería estaba sucia y plagada de piojos, estaban expuestas a contraer enfermedades de sus propias pacientes. La sarna era la única dolencia a que eran sensibles. a Olga le dio siete veces, no la dejaba dormir ni trabajar y tenia todo el cuerpo cubierto con heridas de tanto rascarse, cuando conseguía pomadas, sus compañeras protestaban ya que el emplasto despedía un olor horrible y apestaba la habitación.

Capitulo 19: Las bestias de  Auschwitz

Olga nos platica de un oficial de la SS del campo el cual adquirió mayor notoriedad, llamado Joseph Kramer, " la bestia de auschwitz y Belsen", que fue el criminal No.1 en el proceso de Luneburg. Era comandante y jefe de gran parte del campo, rara vez dejaba las oficinas para ir a inspeccionar. Menciona que era un hombre Robusto, de cabello oscuro cortado a la marinera y sus ojos eran negros y penetrantes, de fisonomía dura y severa. todo lo relativo a su personalidad le daba un aire a Buda.
Un día aquel hombre ordeno desocupar las barracas y las llevo a la explanada, les pidieron sentarse algo que consideraban en ese momento un privilegio, enseguida apareció una orquesta quienes empezaron a ejecutar piezas de música  pero inesperadamente aparecieron aviones alemanes, los cuales grababan aquellas acciones, suponiendo Olga que eran para algún documental.
Un día Kramer Dicto la orden: 
"El campo No. 1 debe ser liquidado mañana al medio día. Deberá vaciarse completamente para su inspección".
Al día siguiente Olga relata que Kramer, obligo a las enfermas a subir a ambulancias pero lo que vio fue un espectáculo los oficiales de la SS golpeaban con locura destructiva a la enfermas y molían a patadas a la embarazadas. Cuenta que el mismo Kramer había perdido la cordura, Olga lo vio abalanzarse sobre una desgraciada mujer y aplastarle el cráneo de un solo garrotazo.

Capitulo 20: la resistencia

La resistencia, cuenta Olga que, era un pequeño "festival" de navidad que organizaban, era un acto clandestino de pasar cartas de un campo a otro, estas eran sus principales manifestaciones de actos clandestinos. Uno de los mas altos actos clandestinas fue la destrucción de los crematorios con paquetes explosivos que eran suministrados por un grupo de guerrilleros rusos que se alojaban a las cercanía del campo. los paquetes de explosivos no eran mas grandes que una cajetilla de cigarro, así que esto facilitaba el escondite de estos artefactos, pero unos cuantos de aquellos paquetes fueron a dar con oficiales de la SS y siempre que los alemanes sospechaban registraban todo, se abalanzaban con las barracas destrozando todo a su paso. En alguna ocasión Olga entrego un paquete a un muchacho, quien al día siguiente apareció colgado en la horca que los alemanes tenían para las personas que tenían artefactos clandestinos. No se sentían Héroes ni pretendían pasar por tales, emprendían misiones de lo mas arriesgadas, pero para olga la muerte y el llamado peligro de muerte tenían un significado muy distintos para las que vivían en Auschwitz-Birkenau.

Capitulos: 13, 14, 15 y 16

Capitulo 13: El ángel de la muerte Contra el gran seleccionador.

En este Capitulo Olga nos Dice la preocupación que sufre ya que Irma Grese se pregunta en porque el doctor Fritz Klein, tenia un puesto especialmente para ella, apesar de en ese momento ser una mujer con la cabeza rapada, sucia, harapienta y con dos zapatos de hombre que no permanecían al mismo par.
Las selecciones eran llevadas a cabo por las mas altas jerarquías femeninas del campo, en los días lunes, miércoles y sábados las revistas duraban desde el amanecer hasta que expiraba y la tarde, hora en que tenían ya completa su cuota de victimas.
Nos platica que Irma Grse era una mujer de estatura media , era muy elegantemente ataviada y tenia el cabello impecable y arreglado; El terror mortal inspirado por su presencia la complacía y deleitaba. Aquella mujer tenia veintidós años pero carecía de "entrañas", escogía a sus victimas con una seguridad y las mujeres que apesar de todo seguían manifestando belleza eran las primeras seleccionadas. 
Gracias a esto, Tiempo después la prensa la llamaría el ángel Rubio, ella manejaba su látigo con libertad, sacudía Fustazos donde quería y a las mujeres no les quedaba mas que aguantarse. Olga nos Relata que Las mujeres golpeadas se contorsionaban de dolor y la sangre que derramaban la hacia sonreír.
Las mujeres seleccionadas, antes de pasar a la cámara de gas debían ser revisadas por el doctor Klein, pero este las hizo esperar tres días y durante aquel tiempo las mujeres condenadas tuvieron que vivir apretujadas y tiradas sobre el pavimento de concreto sin comida ni excusados.

Capitulo 14: Organización

Olga nos cuenta como es que empezaron los robos a expensas de los alemanes, ya que de aquella manera se volvía una acción noble y hasta beneficiosa para las deportadas. Las empleadas del canada robaban prendas para sus camaradas casi desvestidas. La palabra Organizar se utilizaba muchas veces para cubrir hurtos y raterías bajas.Algunas prisioneras hurtaban a sus vecinas sus miserables raciones y muchas que andaban man vestidas se robaban los miseros trapos de otras en los lavabos. En aquel lugar todas la mujeres sin importar que alguna ves su nombre nunca se había puesto en tela de juicio ayudaban con la "organización".
Un día Olga conoció a Malika una prisionera de la barraca nueve la cual vendía material de lana por pan y margarina, y olga necesitaba una chaqueta , pero no tenia que ofrecer. Malika era policía femenina cuya función consistía en blandir el palo para separar a las internas de las alambradas . La obligación de Malika  era impedir el mercado de especies. Durante las horas que estaba en servicio nadie podía negociar con las Checas. Ejercía un monopolio completo y quien pensaría que aquella vendedora de frutas seria la primera mujer de negocios del campo.

Capitulo 15: Nacimientos Malditos

Para Olga trabajar en la enfermería fue un duro cargo cuando había alumbramientos. Cuando nacía un bebe, tanto la mama como el eran mandados a la cámara de gas; Cuando el bebe no tenia probabilidad de seguir vivo o nacía muerto, se le perdonaba la vida a la madre. Olga creía que había estado comportándose con debilidad por bastante tiempo y para esto su plan fue hacer creer que los niños habían nacido muertos para que fuera perdonada la vida de las madres.
Ya fuera de día o de noche las mujeres que empezaban con dolores de parto eran llevadas a las enfermerías  Después de tomar las precauciones necesarias Cerraban con pinzas la nariz del niño y cuando abría la boca para respirar le suministraban una dosis de un  producto mortal.  Algunas mujeres embarazadas lograban ocultar su condición hasta el ultimo momento y los partos se realizaban en secreto en las barracas, gracias a esto la enfermería consiguió un producto, que por medio de una inyección provocaba partos prematuros.

Capitulo 16: Algunos detalles de la vida detrás de las alambradas:

Para el año 1944, disminuyo la vigilancia en el campo ya que desaparecieron los centinelas alemanes que montaban guardia a lo largo de las alambradas. Algunas parejas se quedaban con las rodillas clavadas en la nieve a la sombra de los crematorios, y hacían planes para el futuro, ademas de comunicarse los últimos rumores. Pero un guardia de la SS esperaba media hora y hasta una hora a que las parejas aumentaran su numero para así después abrir fuego contra ellos.A una chica la bala se le había alojado en su ojo, fue llevada al campo F donde fue operada, pero había que sacarle el ojo derecho y el izquierdo corría también peligro, lo único que podían hacer era decirle que se recuperaría en cuatro meses. Las alambradas eran un símbolo de Cautividad y de libertad. Todas las mañanas los trabajadores encontraban cadáveres contorsionados  que se habían quedado adheridos a los cables de alta tensión. El espectáculo de aquellos cuerpos contrahechos les producían sentimientos encontrados.

Capitulos: 9, 10, 11 y 12

Capitulo 9: La Enfermería

En este capitulo Olga nos cuenta como Fue la atencion medica en el Campo, en el cual no hubo durante algunas semanas manera de atender, ademas de nombrarla mienbro del personal de enfermeria. Ella recide en aquel lugar donde mejora su estancia.
Nos platica que atendian de cuatrocientos a quinientos pacientes; Carecian de luz, agua, camas, y lo mas importante, desinfectantes.
La enfermeria se componia de un gabinete de farmacia sin anaqueles, una mesa que se tenia que nivelar con ladrillos y otra mesa que cubrian con una sabana blanca para poder poner ahi los instrumentos. El personal no pasada de cinco apesar de ser cuarenta mil mujeres. Olga se levantaba desde las cuatro de la mañana. Aveces atendian a mil quinientas mujeres al dia, y debian esperar a que fuera su turno en filas de cinco. Las consultas eran desde el amanecer hasta las tres de la tarde, hora que tenian para descanzar, ademas lo usaban para comer, si alguna se quedaba le tocaba limpiar el suelo y los instrumentos. Ahi operaban hasta las ocho de la noche.
Aquel lugar carecian de vendajes, cuando habia partos tenian que pasar la noche sin dormir, pero apesar de todo olga se sentia satisfecha con su trabajo de buena ayuda y que ademas era muy util.
En aquel lugar las dejaban bañarse al terminar su jornada laboral, utilizaban un artefacto con dos agujeros y solo se podia usar si se tapaba con migas de pan, este contenia agua autentica y tambien tenian un trozo de jabon, que no era mas que una pasta pegostiosa de extraña procedencia y olor asqueroso, pero hacia espuma.

Capitulo 10: Un motivo para vivir

Aunque el campo era básicamente de mujeres, había algunos internos hombres. Un francés, denominado por la autora como L, llegó a convertirse en un visitante asiduo a la enfermería. Además de su presencia simpática y graciosa, L traía noticias sobre el frente de guerra. Las noticias levantaban el espíritu a las reclusas pues no tenían acceso a ninguna información. Olga cae en una profunda depresión, L la llama y la alienta a seguir adelante. Le habla de su trabajo y del sufrimiento que llega a quitar. Olga le pregunta qué tiene que hacer. L le dice que debe de divulgar la situación externa, mantener la fe y la esperanza en las reclusas y por el cargo que desempeña, queda perfecta como oficina de correos. Se le entregarían cartas y paquetes, jamás sabría el nombre de ninguna persona que lo manda o recibe, ni tampoco sabrán el suyo por razones estrictas de seguridad, si la descubren será mandada inmediatamente a la cámara de gas y de ahí al crematorio. Olga sabía que el mundo se tenía que enterar de los horrores Nazis. Olga aceptó y formó parte de la Resistencia. De ésta manera, Olga supo a detalle, todo lo que ocurría en Birkenau y Auschwitz.

Anteriormente los seleccionados eran fusilados, en 1941 se instalaron cuatro crematorios. judíos y cristianos eran enviados por igual al crematorio. Fue a partir de 1943 cuando se reservó “la solución final” exclusivamente al europeo que practicara la religión judía y a los gitanos. Dos crematorios eran enormes y consumían una cantidad extraordinaria de cadáveres en poco tiempo. Cada unidad consistía en un horno, un vestíbulo, y una cámara de gas. Todas constaban con una chimenea, que era alimentada con nueve hogueras. Los cuatro hornos de Birkenau eran calentados por treinta fogatas en total se podían reducir 360 cadáveres a cenizas cada medía hora, y 17, 280 cadáveres cada  24 horas. Además, la autora nombra la existencia de las “fosas de la muerte” donde perecía un promedio de ocho mil personas. Al día 24 mil cadáveres eran reducidos al polvo.

Diariamente, llegaban a Birkenau dos o tres trenes, cada uno con treinta o cincuenta vagones repletos de judíos, enemigos políticos, criminales, prisioneros de guerra y civiles. Todos llegaban con falsas promesas y siempre era el mismo rito: izquierda cámara de gas y derecha, detención temporal en Auschwitz. El procedimiento era sencillo: los deportados llegaban con falsas promesas, había pocos soldados, si la familia quería estar reunida se les permitía, de fondo se escuchaba algún conjunto de jazz, se les informa que serán bañados para desinfectarse, se amontona la mayor cantidad de personas posibles en unos cuartos enormes que simulan baños públicos. Se cierra la puerta y cuando la temperatura humana había subido, un soldado alemán dejaba caer una pastilla de gas a base de cianuro. La asfixia es inmediata. Cuando se abrían las puertas, se encontraban los cuerpos amontonados unos sobre otros, los moribundos eran levantados con brusquedad y arrojados entre los cadáveres para ser llevados a los hornos crematorios, no sin antes, extraerles dientes de oro, pertenencias y cortarles el pelo. Por supuesto que ningún alemán realizaba estás tareas, todo lo realizaban los mismos presos que solamente estaban esperando su acceso, tarde que temprano, a la muerte.

Capitulo 11: Canadá

Canadá era el nombre con que se conocía al edificio que resguardaba los objetos de valor que habían sido confiscados por los custodios. Trabajaban 1200 hombres y 2000 mujeres. Adentro, se encontraba desde juguetes hasta botellas de vino, trabajar o tener algún contacto en el Canadá constituía un verdadero privilegio, pues un mercado negro se desarrollaba en su interior. Un kilo de mantequilla por 500 marcos, un kilo de carne por 1,000 marcos, un cigarro, 7 marcos. 

Capítulo 12: El depósito de cadáveres.

Olga trabajaba de enfermera, pero eso no le perdonaba trabajar, como todas, en el transporte de cadáveres. Básicamente, el trabajo consistía en trasladar los cuerpos de la enfermería al depósito de cadáveres. A menudo, cuenta la autora, sus pacientes eran su propia carga en cuestión de días.No pasó mucho tiempo sin que Olga notara graves trastornos en su menstruación; y no tardaría en descubrir, que se realizaban experimentos en las mujeres pues, sustancias desconocidas eran agregadas al alimento.